Tendencias sombrías en la Iglesia Moderna
"Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno. Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna." (1 Juan 5:19-20)
Una creciente tendencia infiltra nuestras iglesias, de utilizar técnicas y estrategias que se han originado en el mundo, aplicándolas a la vida cristiana, y al ministerio: bandas de rock, que con el pretexto de "evangelizar" dan conciertos que en nada difieren de un concierto de rock mundano, y piensan que porque copian al mundo, llegan mejor con el mensaje-sin considerar que la mayoría de los concurrentes son cristianos (o algo así); predicadores que utilizan técnicas psicológicas, y que las disfrazan bajo el pretexto de "depositar mejor el mensaje" en el corazón; evangelistas que utilizan hallazgos científicos dudosos, intentando reconciliar la ciencia con la Biblia, aunque la Biblia se refiere a la ciencia de este mundo como "la falsamente llamada ciencia," por medio de la cual, el mundo se ha rehusado a conocer a Dios, pues el principio de la sabiduría es el temor de YHVH:
En todo este proceso, la cruz de Cristo es vaciada de su eficacia, pues si debemos utilizar a "Cristo y algo más" para predicar a Cristo y a este crucificado, entonces no estamos predicando a Cristo y a este crucificado.
El problema principal en todo esto es que "el mundo entero está bajo el maligno," y esta es una advertencia que no deberíamos tomar a la ligera. Toda la ciencia, los medios de comunicación, la educación moderna, la música, la moda... EL MUNDO ENTERO, está bajo el maligno. ¿Por qué utilizar cosas que el diablo mismo ha inspirado, para predicar un mensaje que nada tiene que ver con el principe de este mundo?
Ahora, si consideramos que la primera carta del apóstol Juan fue escrita a modo de proporcionar medios de autoexaminación, por los cuales podremos conocer si realmente estamos en Cristo o no, entonces no podemos ignorar lo que Juan nos presenta en este pasaje. Justo después de decir: "Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios (1 Juan 5:13);" él escribe las palabras que leímos al principio. Lo que nos debería hacer pensar que si estamos verdaderamente en Cristo, y tenemos la verdadera vida, tenemos el entendimiento de Dios para discernir todas estas cosas, y no envolvernos en modas que no convienen.
Parece ser, por la forma en la que este pasaje fue escrito, que una de las evidencias de que una persona está realmente en Cristo, es que sabe apartarse de todo aquello que es del mundo. Ahora bien, si esto es verdad, deberíamos decir también que: si no podemos discernir la verdad, y fácilmente recibimos todo aquello que se presenta como "inofensivo," que no es otra cosa que invento de satanás, e injuria a Cristo, esto significa que posiblemente no estemos en Cristo.
El que tenga oídos para oír, que oiga.